En lo relativo a la salud ginecológica muchas mujeres tienen dudas sobre cuándo deben realizarse una revisión, en qué consisten las pruebas o si es mejor acudir a la seguridad social o a un especialista en una clínica privada.
Son muchas las opiniones al respecto, sin embargo, lo más importante es la tranquilidad y la seguridad de que tu salud íntima está en orden durante todas las etapas de la vida: desde la juventud, la maternidad o la menopausia. Uno de los principales factores, y quizá el más importante, a tener en cuenta a la hora de elegir tu centro para la revisión ginecológica en la seguridad social o en la privada es que te aporte confianza.
Tiempo de espera para una revisión ginecológica en la seguridad social
Las diferencias en la revisión ginecológica en la seguridad social y en la privada son, como en otras especialidades, notables. Y es que, hay que entender que en el sistema sanitario público la demanda de atención es mucho mayor y en ocasiones se sufren retrasos o colapsos para dar cita o recibir resultados de pruebas. Ésta es quizá la mayor diferencia: el tiempo de espera.
Para realizarte una revisión ginecológica en la seguridad social el procedimiento es más largo y pesado que en un centro privado. En primer lugar, debes acudir a tu médico de cabecera o de atención primaria. Éste valorará los síntomas (si existen) y según su criterio realizará un volante o petición de consulta con un especialista en ginecología. Actualmente existe cierto colapso en esta especialidad en la mayoría de hospitales españoles.
Sin embargo, en un centro privado la demanda de citas es menor y, por tanto, los tiempos de espera se reducen sustancialmente. Habitualmente podrás acudir a revisión ginecológica tras pedir cita directamente en el centro privado, sin necesidad de pasar por el médico de atención primaria.
Diferencias en las pruebas en una revisión ginecológica en la seguridad social y en un centro privado
Otra de las diferencias a la hora de realizarte una revisión ginecológica en la seguridad social es que no se consideran necesarias algunas pruebas ginecológicas comunes como la ecografía de mama, análisis de sangre o la prueba Papanicolau. Según la Sanidad española las citologías deben realizarse cada 3 años, por lo que la revisión ginecológica en la seguridad social cada año es innecesaria. Es entendible que, si no se presentan síntomas o irregularidades en el ciclo menstrual, las revisiones ginecológicas puedan espaciarse más en el tiempo. Sin embargo, una revisión ginecológica anual no sólo sirve para la detección de patologías o enfermedades, también para que las mujeres conozcan su cuerpo y sientan la tranquilidad de que su salud ginecológica es correcta.
En un centro privado puedes pedir realizarte cualquier prueba ginecológica, ya sea por prevención o por tranquilidad. Además, tu especialista te recomendará las pruebas que necesites y te dará y explicará los resultados con la mayor brevedad posible. No obstante, en un centro ginecológico privado las pruebas o exámenes tienen un coste. Si tienes un seguro médico privado seguramente éste se incluirá en la cuota y si no, es un gasto en salud fácilmente asumible por la mayoría de mujeres.
Especialistas de confianza y seguimiento en tus revisiones
Otra de las diferencias más relevantes entre una revisión ginecológica en la seguridad social y en un centro privado es el especialista que te atiende. Tanto en el sistema sanitario público como en el privado los facultativos están bien preparados y formados, sin embargo, en un centro privado podrás elegir el ginecólogo que te atienda y en la seguridad social no es siempre posible.
Las ventajas de elegir tu especialista es que la atención es más personalizada, el seguimiento de tu historial médico más exhaustivo y la confianza médico-paciente mayor. Para una revisión ginecológica, ya sea la primera o una rutinaria, es importante tener confianza con el médico especialista ya que con una buena relación es más sencillo y resulta menos incómodo para la paciente plantear ciertas dudas o problemas íntimos.
Además, habitualmente los centros privados tienen especialistas de diferentes ramas de la ginecología en un mismo centro para consultas o dudas complementarias.
La importancia de las instalaciones
La tecnología avanza imparable en todos los campos, por supuesto también en la ginecología. Tanto para la detección precoz, el tratamiento de enfermedades o para la realización de pruebas ginecológicas rutinarias, las últimas tecnologías mejoran la experiencia del paciente y son mucho más precisas y eficaces.
El sistema sanitario público español hace sus esfuerzos para equipar a todos los hospitales con la última tecnología. Sin embargo, son muchos los centros públicos y no todos pueden dotarse con tecnología de última generación. Los centros privados suelen estar equipados con lo último en tecnología de la salud para ofrecer a sus pacientes la mayor comodidad y eficiencia.
La gran demanda de revisión ginecológica en la seguridad social se transforma en miles de personas haciendo uso de una tecnología en poco tiempo, por lo que las instalaciones no suelen estar tan bien conservadas como en los centros ginecológicos privados.
En definitiva: rapidez y comodidad frente a coste
Las diferencias entre una revisión ginecológica en la seguridad social y en un centro privado se podrían resumir, según nuestro punto de vista, en: rapidez, comodidad y mayor número de pruebas en un centro privado frente a la gratuidad del sistema público nacional.
El coste de una revisión rutinaria en un centro ginecológico suele ser asumible por la gran mayoría de la sociedad española, sin embargo, es una decisión personal acudir a un centro público y privado. La diferencia que más nos comentan los pacientes de EGR frente al sistema público es el compromiso e implicación de nuestros doctores en cada una de sus dudas o complicaciones. Para nosotros la atención a nuestros pacientes es primordial.
Y tú, ¿qué experiencias has tenido en tus revisiones ginecológicas? ¿Encuentras más diferencias entre las dos opciones? Nos interesa mucho tu opinión, ¡esperamos tu comentario!
Equipo de Ginecología y Obstetricia de Madrid, en el Instituto de Medicina EGR