Es en estas fechas veraniegas cuando una de los cosas que más nos gusta hacer es ir a la playa o a la montaña y pasar largas horas tomando el Sol.
Desde el Instituto Médico EGR os recomendamos mucha precaución y sobre todo mucha protección.
Si estás leyendo este artículo probablemente sea porque puedas padecer una quemadura solar. No te preocupes, sigue leyendo y te ayudaremos a detectar la gravedad de la misma y qué hacer en cada caso para que sus efectos en tu piel sean lo menores posibles.
¿Cómo saber si tienes una quemadura solar o no?
Se debe tener en cuenta que probablemente hasta pasadas 24 horas los síntomas de la quemadura solar no se presenten al 100%. De todas formas, ten en cuenta estos síntomas para saber si puedes haberte quemado por el sol.
El primer síntoma es que al presionar con el dedo la zona afectada, se crea una mancha blanca y al comparar con la zona en la que no se ha apretado se distingue una diferencia de color, apreciando como donde has puesto el dedo es de color rojo y la zona de alrededor es roja.
Si la quemadura tiene un grado mayor, no hará falta presionar con un dedo y se verá la rojez en la zona afectada.
El siguiente nivel de quemadura es la aparición de ampollas en la zona afectada. Estas ampollas podrán aparecer a las horas o días de haberse producido la quemadura.
Si tu quemadura ha sido de un grado grave, entonces puede que tengas fiebre, escalofríos o nauseas.
Si tienes alguno de estos síntomas, entonces es muy probable que hayas tenido una quemadura provocada por el sol.
¿Qué debes hacer si tienes una quemadura solar?
Lo primero es evaluar la gravedad de la misma. Si tus síntomas son fiebre, nauseas, desmayos, deshidratación entonces debes acudir a un médico con carácter de urgencia. A veces puedes notar el pulso acelerado, tener mucha sed, sensibilidad a la luz y las ampollas mencionadas anteriormente.
Si no tienes estos síntomas, entonces sigue los siguientes consejos, pero no olvides visitar a tu dermatólogo para comprobar el estado de tu quemadura.
- Bebe mucha agua para rehidratar tu cuerpo y tu piel.
- Date una ducha con agua templada y al terminar aplica toallas húmedas a temperatura del tiempo en la zona afectada. Un truco: puedes aplicar bicarbonato sódico al agua y el dolor se reducirá.
- Aplica una loción calmante sobre la piel. El Aloe Vera es uno de los mejores remedios para cuidar y provocar la recuperación de las quemaduras. Aplícala cuando la temperatura de la zona afectada por la quemadura solar haya bajado. Su principal función es la de aliviar el dolor y reducir la inflamación. Las cremas de cortisona también pueden ayudar al cuidado de la zona afectada.
- Utilizar leche con agua tibia si no hay ampollas y la piel no está agrietada.
- Algunos medicamentos pueden ser también útiles en estos casos. Normalmente se recomienda utilizar ibuprofeno o acetaminofén. Estos medicamentos se utilizarán en caso de haber una inflamación.
- Procura utilizar ropa holgada y a ser posible de algodón.
- Si tienes ampolla, lo mejor es no tocarlas y protegerlas con una gasa seca.
- Evita exponerte al sol durante los próximos dos días o hasta que notemos que la piel se ha recuperado.
- Utiliza after sun diariamente hasta que la piel vuelva a recuperarse.
¿Qué no debo hacer cuando padezco una quemadura solar?
- Si es un niño el afectado, no se le deben dar aspirinas.
- Evitar el uso de benzocaína, lidocaína o vaselina.
- Nunca utilices jabón para lavar la zona afectada.
- No utilizar agua fría en la zona afectada.
- No rascar la zona afectada.
¿Cómo prevenir quemaduras solares?
Aunque la quemadura ya está hecha, debido a las posibles causas nocivas de la quemadura solar, nos gustaría volver a hacer hincapié en que se debe hacer para prevenir una quemadura solar.
Es importante para prevenir futuras quemaduras solares saber cuales son los factores más importantes que condicionan la generación de la quemadura.
- Los bebés y los niños son los más sensibles al efecto solar, por eso con los bebés se debe tener especial cuidado.
- La hora es muy importante, tener en cuenta que entre las 11 y las 16 horas los rayos solares inciden con mayor fuerza.
- La zona y los objetos que te rodean pueden afectar también a incrementar el efecto de los rayos del sol. El agua aumenta la potencia de los rayos solares por su reflejo, la nieve y la arena también ayudan a aumentar el efecto y potencia de los rayos solares.
- El color de la piel afecta también, cuanto más blanca más fácil es la generación de la quemadura.
- El uso de ciertos medicamentos (antibióticos, hormonas o antidepresivos) puede aumentar el efecto de los rayos del sol en las personas que las consumen.
- La altitud a la que nos encontramos también afecta. El efecto de los rayos solares es mayor en zonas altas como la montaña, que en zonas bajas como la playa.
A continuación enumeramos las acciones más importantes a llevar a cabo para prevenir las quemaduras la próxima vez.
- Utiliza protectores de calidad y alto nivel de protección. Por lo menos utiliza un factor de protección 30.
- Aplica el protector solar más a menudo en las zonas más sensibles como pueden ser la cara, orejas, nariz y hombros.
- Aplica la protección solar 30 minutos antes de exponerte a los rayos solares.
- Aplicar protección solar cada 2 horas o después de haber nadado o sudado.
- Utiliza gorra si tu exposición al sol va a ser larga.
- Evita tomar el sol en las horas donde sus efectos son más dañinos. Como decíamos antes, entre las 11 y las 16 horas su efecto es mucho más agresivo.
- Utiliza gafas con protección de rayos uva.
- No te olvides de proteger tus labios con protectores también.
Esperamos os sea de utilidad este post, ¿Tenéis algún consejo más?